5 de septiembre de 2010

Fiebre


Un sol de angustia soledad
tengo a mi espalda,
calcina mi alma,
derrite mi esperanza.
Hierve mi piel,
mis labios se resecan,
duelen,
esta insolación de pensamientos
me mantienen en febril delirio;


ni compresas de fría indiferencia,
apaciguan esta calentura ,
no hay bálsamo que alivie
la aridez y resequedad de esta pasión;
lo sé, lo sé,
es que no consigo
el ardor de tu olvido apaciguar.
Texto: Dario

4 comentarios:

Tempus fugit dijo...

Fiebre que la sangre en rojas cenizas troca... y no hay agua de alondras...

un abrazo

இலை Bohemia இலை dijo...

hay ardores de olvido que ni los mejores extintores logran apaciguar...


bss

LA ZARZAMORA dijo...

Hay calenturas que cuestan de calmar.
Besos.

Elizabeth Torres Rodríguez dijo...

...no existe pirómetro que alcance a medir este calor que tengo por dentro y que te reclama en silencio esta noche, esta noche con pocas horas untadas de ti...
No puedo dormir sintiendo mis labios arder por ti...
Cómo conciliar el sueño si el roce de tu piel todavía me hace cosquillas en el pecho, en los hombros, en la espalda...
Cómo dormir con esta insolación.